Una nueva medida, revelada por el Financial Times, indica que Estados Unidos ha impuesto aranceles a las importaciones de lingotes de oro de un kilo y de 100 onzas, lo que supone un desafío importante para el papel central de Suiza en el refinado y el comercio mundial de metales preciosos.
El 31 de julio, la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de EE. UU. (CBP) emitió una carta de resolución clasificando estos lingotes bajo el código arancelario 7108.13.5500, sujeto a impuestos, anulando la exención previamente prevista bajo el código 7108.12.10. Este cambio rompe con la expectativa del sector de que el oro suizo refundido seguiría libre de aranceles.
Esta reclasificación golpea a Suiza, el mayor centro de refinado del mundo, en un momento crítico. En los doce meses hasta junio, las exportaciones suizas a EE. UU., principalmente de oro, alcanzaron los 61.500 millones de dólares, que ahora afrontan aproximadamente 24.000 millones de dólares en nuevos aranceles bajo el gravamen del 39 % impuesto por Washington a los productos suizos.
Christoph Wild, presidente de la Asociación Suiza de Fabricantes y Comerciantes de Metales Preciosos, calificó la medida como «otro golpe» al comercio bilateral de oro, advirtiendo sobre posibles problemas de suministro.
En los mercados, los futuros de oro del COMEX se dispararon: los contratos con entrega en diciembre alcanzaron un máximo histórico de 3.534,10 $, un aumento del 1,3 %, lo que refleja la fuerte demanda en un contexto de incertidumbre. La prima sobre el precio spot de Londres se amplió en más de 100 $.
Tradicionalmente, los flujos mundiales de oro siguen una ruta triangular: los grandes lingotes londinenses de 400 onzas – del tamaño de un ladrillo – se envían a Suiza, donde se refundan en lingotes de un kilo (del tamaño de un teléfono inteligente) preferidos en Nueva York. Este sistema ahora enfrenta interrupciones.
En medio de la confusión sobre la clasificación arancelaria, varias refinerías suizas habrían reducido o detenido sus envíos a EE. UU., mientras sus equipos legales se apresuran a determinar qué productos podrían seguir exentos.